Despluman a Pensionados en sucursales del Banco HSBC

*Los tratan mal y en algunos casos hasta con desprecio

*No les importa que algunos sean discapacitados

El banco HSBC, una institución de banca múltiple de capital de origen chino, ha sido protagonista de escándalos financieros en varios países y hay quienes afirman que podría estar siendo investigada como posible enlace de transferencia para la fuga de capitales de la Estafa Maestra.

Lo que no se sabía es que. en algunas de sus sucursales en el Estado de México, sus cajeros y ejecutivos despojen de sus pensiones a los pensionados, personas discapacitadas y de la tercera edad.

El último caso concreto ocurrió en la sucursal Plaza Jardines, situada en Avenida Prados esquina Pensamientos, municipio de Tultitlán Estado de México, donde la señora Emma Orta, fue despojada en varias ocasiones por una de sus cajeros, con cifras que van de los $3,000.00 a los $4,000 pesos.

La señora Orta, la cual es pensionada del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y además porta credencial de persona con discapacidad, originalmente creyó que tales despojos tenían que ver con algún error en su tarjetón de pagos, por lo que fue a la subdelegación administrativa del Instituto ubicada sobre la Avenida Gustavo Baz, en el municipio de Tlanepantla, para aclarar el error pero ahí le hicieron ver que el líquido de $6,000.00 que recibe cada mes por concepto de pensión, le había sido depositado puntualmente en la mencionada sucursal de dicho banco.

Indignada, la señora Orta acudió a la sucursal a exigir le pusieran enfrente a la empleada que la había despojado indebidamente en varias ocasiones de sus recursos, pero misteriosamente esta desapareció y no aparece por ningún lado, por lo que la cuehtahabiente teme que haya colusión entre los empleados de la referida sucursal para despojar de sus ahorros específicamente a los pensionados.

“Estas empleadas confunden a las personas porque unas veces se les ve con el cabello largo y otras con el cabello corto, para que no te acuerdes de cómo eran ellas, además de que nadie quiere dar el nombre de las personas, no portan gafete ni nada porque se encubren entre ellos mismos”, explicó a quien esto escribe la afectada.

Otro caso, también indignante, se suscitó en la sucursal Plaza Zentralia en Coacalco de Berriozabal, Estado de México, donde una cuentahabiente que portaba credencial de discapacidad solicitó a uno de los empleados el saldo que tenía disponible en su cuenta, pero no obstante haberse anotado en una libreta para solicitar el dato, la señora no fue atendida.

El empleado, por demás prepotente, “un godín” con saco y corbata que tenía la obligación de proporcionar con amabilidad y cortesía dicho servicio a su cuenta habiente, la cual además tenía problemas de sordera, no la atendió y con ínfulas de soberbia la transfirió a otro de sus compañeros, el cual tampoco le hizo caso a la referida cliente y así pasaron dos horas hasta que, indignada la afectada comenzó a gritar para ya no pedir sino exigir que le anotaran su saldo y fue hasta entonces que los empleados de marras accedieron a proporcionarle el dato a la referida dama.. Dicho en palabras llanas lo que pudimos observar en el banco HSBC, fue deshumanización a más no poder y saqueos a pensionados en dichas sucursales.